Disponer de una piscina es sin duda una de las mejores inversiones que se pueden hacer en una casa. Disfrutar de un refrescante baño durante la época de calor es un privilegio que apenas se puede describir con palabras. Si ya has decidido que es el momento de disponer de tu propia piscina, deberás tener claro cuál el revestimiento ideal para ti.
Si todavía no tienes claras las opciones de las que dispones, no te preocupes. A continuación te contaremos en qué debes fijarte a la hora de elegir uno para tu piscina y cuáles son los tipos de revestimiento más demandados.
Criterios de elección
Elegir el recubrimiento ideal para tu piscina no es sencillo. Fijarse únicamente en un aspecto como el económico o el diseño, limita nuestra capacidad de elección y hará con que quizás no valoremos otras opciones que puedan ser mejores y que se ajustarían igualmente a nuestro presupuesto.
Antes de tomar una decisión te recomendamos que tengas en cuenta los siguientes aspectos:
- Diseño
- Precio
- Durabilidad
- Sellado
- Mantenimiento
Haciendo un balance de estos cinco elementos, sabrás en qué aspectos destacan cada material y en cuáles se muestran sus debilidades. De esta manera sabrás que tu elección ha sido la correcta. A continuación te dejamos los tipos de revestimiento para el interior de las piscinas más populares. ¡No te las pierdas!
Tipos de revestimiento
Existen muchos materiales con los que podrás obtener un acabado a tu piscina elegante y efectivo ante cualquier problema de fuga de agua. Echa un vistazo a los materiales más demandados:
Gresite
Sin duda se trata de los revestimientos más frecuentes. Consiste en un azulejo vítreo con un buen sellado y permite realizar casi cualquier tipo de diseño en la piscina. Otro de sus puntos fuertes lo encontramos en su durabilidad, ya que ofrece una gran resistencia en condiciones climáticas adversas y a los productos químicos.
¿Cuáles son sus desventajas? En este caso su instalación y el propio material requieren de un desembolso económico mayor. En cuanto a su mantenimiento, será necesario limpiarlo anualmente con productos específicos.
Pintura
La gran ventaja de utilizar pintura es que se trata de la opción más económica. Ofrece una buena resistencia a los productos químicos y evita la formación de algas y mohos.
La contrapartida a esta opción se encuentra en factores como el mantenimiento y el propio sellado que ofrece. Si tu piscina es de hormigón, será necesario emplear una primera capa de pintura de poro abierto para evitar la formación de grietas y que este pueda «respirar». Si queremos aplicar una pintura de poro cerrado se aconseja esperar un periodo de dos años.
Otro inconveniente de la pintura es que su exposición a factores climáticos como el sol o el frío invernal provocan su desgaste. Por esta razón serán necesarias nuevas capas de pintura cada varios años para evitar que esta se despegue y se puedan formar grietas. Evitando estos problemas es una buena manera de ahorrar agua.
Azulejo
Se trata de una opción muy demandada y que cada vez vemos más. Ofrece un diseño moderno y su instalación es relativamente sencilla, como ocurre con los azulejos de baño. Su impermeabilidad es inmejorable. En cuanto a precio lo situaremos en un nivel intermedio, ya que resulta más caro que otras opciones como la pintura aunque existen soluciones todavía más costosas.
La gran desventaja de esta elección reside en su durabilidad. Se trata de un material especialmente vulnerable a los efectos climáticos y los productos químicos, los cuales provocan su decoloración.
Liner o Láminas PVC
Es una opción manida para aquellas piscinas que presentan problemas de grietas o fugas por su bajo coste. Consiste en una lona fabricada en PVC que se puede adaptar a casi cualquier superficie y tamaño.
En cuanto al diseño, puede ser muy variado siendo una de las opciones más populares la imitación del revestimiento de azulejo. Además del bajo coste del material y su impermeabilidad, otra de las grandes ventajas es que implica un menor mantenimiento y su durabilidad es relativamente elevada (en torno a los 10 años).
La desventaja del liner es su compleja instalación. Para proceder a su correcta colocación será necesaria la labor de un profesional, lo cual aumentará el precio final de la instalación.
Otros tipos de revestimiento
Aunque las opciones anteriores son las más populares, también comienzan a aparecer nuevos tipos de revestimiento que aportan un aspecto diferente a las piscinas:
- Acero Inox: El desembolso necesario no está al alcance de todos los bolsillos. Sin embargo, se trata de una inversión que se puede amortizar con el tiempo dada su gran durabilidad.
- Madera: En la mayoría de ocasiones se trata de madera sintética. Se trata de una opción recomendable y habitual en piscinas móviles. La contrapartida es que requiere de un buen mantenimiento y no resulta especialmente económico.
- Arena: Para los que añoran la playa, se trata de una novedosa estructura que simula esa experiencia. Desde luego para un resultado óptimo será necesaria una buena planificación y esfuerzo en su construcción y mantenimiento.
Una buena solución para incrementar la durabilidad de cualquier recubrimiento y reducir el mantenimiento de tu piscina es la instalación de una cubierta. En Cubrima somos especialistas en adaptarnos a tus necesidades y diseñar la solución perfecta para tu hogar. De esta manera lograrás mantener protegida a tu piscina.
Además, ahorrarás en la utilización de productos químicos para mantener limpia tu piscina, ya que una de las ventajas de una cubierta es que impide que la suciedad entre. Te sorprenderán los beneficios de instalar una cubierta. Pídenos presupuesto sin compromiso y estaremos en contacto.
